sábado, 3 de agosto de 2013

"Soy del pasillo, del sanjuanito, de los valses anorados...no me averguenzo para nada"



“GUALACEÑIDAD…Un sentimiento soterrado”

Por Dr. Nelson Muy Lucero. MD




Desde la Calle Manuel Moreno…hasta los 100 metros de distancia desde el puente Blanco siguiendo la Gran Colombia, prolongándose hasta la calle Loja, junto al viento que arrastraba el polvo arenoso de sus calles se escuchaba fuerte el ruido que producían cuando el combo lanzado por sus artesanos, se estrellaba contra el yunque, dándole forma al hierro candente…así pretendemos emulando a esa esforzada y diaria faena de aquellos artesanos de la época, continuar dándole forma a nuestra historia, recuperando investigaciones de nuestros “guambras estudiosos” como lo dirían mis mayorales…al mismo tiempo buscando rescatar desde los funestos rincones olvidados de la mente extractos propios de esa historia jamás contada…
Somos testigos como las últimas generaciones les han condenado al olvido el conocimiento de nuestras auténticas raíces, del cómo llegamos y de donde procedemos…por mera casualidad les decimos que aquí estamos somos parte de aquí, de una generación a la que llamaremos de transición, entre la costumbre cultural de ancestro, caracterizado por el uso de las alpargatas, el poncho, el sombrero, “el supernaval”, la pollera, la blusa “con bordados”, el “ucunchi”, el reboso y el paño, para tomar rumbo a una modernización anclándose en el uso de los zapatos de cordón al mocasín, de los “encharolados” a los de taco alto, para llegar a los de plataforma, el “casimir”, los deportivos, el terno, la corbata, los calentadores y los multicolores vestidos a la moda…La moda no incomoda decíamos, pero otra era la realidad,  las costumbres variaron el “modus vivendi” igual, pero los sentimientos de “gualaceñidad” se quedaron y jamás claudicaron…porque estemos donde estemos…por tierras lejanas que pisemos siempre nos sentiremos orgullosos…”…de cantar como el habla, para decirle al mundo…Soy gualaceño, nacido allí , en un hermoso valle, junto al frio de mis montañas y las brisas de mi río, cobijado por el fulgurante sol de la serranía ecuatoriana, nadie lo podrá negar…SOY GUALACEÑO”.
Cuenca, 2 de agosto del 2013

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