¡UNA CIUDAD CON LUZ PROPIA… Gualaceo!
Por: Dr. Nelson Muy
Lucero. MD
De nuestros ancestros nos llegaron
noticias de cómo nació y creció esta urbe cargada de historia, con
acontecimientos impregnados en la memoria colectiva de antaño, que junto a las poquísimas
fotografías que aún se conservan, se constituyen en el testimonio fiel de un
pasado mágico e increíble.
De los
mayores de este pueblo, lo pude conocer de primera mano, las penalidades y los
acontecimientos que ocurrieron en su momento, como lo fue el funcionamiento del
primer generador eléctrico, cuyas turbinas estaban siendo movidas por las
correntosas aguas del río San Francisco; los mecheros y las velas fueron
sustituidas por un foco y sus calles se adornaron con la siembra de los
necesarios postes, para soporte de la telaraña de cables que se irían tejiendo
sobre la naciente ciudad; las penalidades sanitarias, las epidemias, como la
fiebre tifoidea, que afecto a toda la comunidad gualaceña, pueblo declarado en
ese tiempo en emergencia sanitaria; debido a estas desgracias sanitarias, este
pueblo pudo contar con la primera planta
de “agua potable” y la canalización de las aguas servidas. Ocurrió lo inefable,
lo inaudito…el traslado de nominación, del antiguo hospital al centro cantonal,
con una categorización inferior a Centro de Salud Cantonal…hasta la fecha no
hay gente que haya gestionado al Ministerio de Salud Pública, la construcción de
un cómodo y moderno Hospital como se merece el Cantón… ¡increíble verdad!
Con trabajo y
sacrifico, los gualaceños han sorteado enormes tropiezos junto a sus derechos y
obligaciones, empujando siempre a la gestión colectiva(municipio) para que nos brinden
servicios de calidad, que beneficien a todos los ciudadanos, buscando siempre elevar
el estándar de vida a la colectividad entera. Cuando esto no se da, el pueblo
sabe reclamar, y hacerse respetar; grandes son los levantamientos ocurridos en
este pueblo, desde el histórico levantamiento de los Indígenas de San Juan,
hasta los levantamientos populares propiciados por las JUNTAS CIVICAS
CANTONALES, llegando incluso al derrocamiento de sus autoridades Municipales.
Estoy
previniendo a las autoridades por elección popular, que frente a las leyes
impuestas como la generación de los impuestos que de ellas derivan, a los
cuales nos están pretendiendo acostumbrar, cuando lo apliquen, lo piensen más de una vez, que si bien lo
estamos aceptando indolentes, esto puede llevarnos a desencadenar grandes y graves
acontecimientos…
Ya es
intolerante e inadmisible la inercia de las autoridades llamadas a hacer grandes
proyectos “pero por gestión propia”, para una gran ciudad: “Gualaceo, alma
y jardín del Azuay”
Este es nuestro PUEBLO, que por generaciones tuvo que luchar en contra
de su aislamiento político y social para poder gritar al mundo gracias a nuestros
hermanos migrantes, que existimos, que somos una urbe aunque pequeña
pero con gran personalidad y con atributos propios de una ciudad alegre y
emprendedora.
¡EN GUALACEO... tiemblan los que detentan
el poder cuando su gente se levanta!
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